Acerca del tamaño de los personajes en el elenco de "Gravity Falls"

Hola a todos los seguidores en twitter. 

Estamos aquí, reunidos de nuevo, para tratar un tópico más relacionado ese pueblo fantástico de Oregon, y como ya se especificó en el título de este artículo, vamos a ver en qué afecta el tamaño de los personajes tanto en el aspecto físico como mental y emocional.

Pues vayamos directo al grano. Empecemos por reconocer que, en "Gravity Falls", el contraste en la estatura de los personajes adultos con respecto a los jóvenes es muy, muy marcado. Y si bien es cierto que ese aspecto refuerza el impacto de los conflictos ocasionales que hay entre personajes pertenecientes a distintas generaciones, también ayuda a comprender el sentimiento de vulnerabilidad que acompaña a quienes... carecen de mayor experiencia.

Como primer argumento recordemos que Alex Hirsch, el creador de la serie, declaró en un documental que la historia se basó en gran parte en sus recuerdos, en cómo él se sintió durante la infancia: vulnerable, lleno de inquietudes, desconocedor de muchas cosas.

Queda claro que en la vida real los niños de doce años son bastante más grandes de lo que se ve con los personajes Dipper y Mabel. De hecho, si revisan el corto animado piloto, los gemelos Pines tienen un poco más de estatura que sus versiones de la serie animada definitiva. Según parece, para los episodios de las dos temporadas, se decidió reforzar aún más esa premisa de la vulnerabilidad que conlleva la niñez.

Para expresarlo de otro modo, digamos que el tamaño inusualmente pequeño de ciertos personajes es un símbolo de la fragilidad intrínseca del ser humano, su imperfección, su necesidad nata por buscar un equilibrio y un camino hacia la realización. Ser pequeños ante lo enorme, lo inconmensurable del mundo y el universo, y los retos que encierran, nos vuelve... deseantes por naturaleza.

Entendiendo mejor este punto, Alex Hirsch usó esta retórica visual para hacer aún más fuerte la marea de emociones que abruman a Dipper, desde su enamoramiento inesperado y prematuro (cuya feliz resolución de entrada sabe que es imposible), su inmadurez que lo angustia, cuando en más de una ocasión se ve obligado a demostrar fuerza y hombría, hasta su aparente debilidad ante los muchos misterios y peligros que emergen en "Gravity Falls".

Mabel también experimenta vulnerabilidades análogas a las de Dipper, pero las resuelve a su manera, como sólo las mujeres pueden hacerlo, y en eso hace la gran diferencia con respecto a su hermano. Es por eso que el permanecer juntos, apoyarse, aprender uno del otro y complementarse, es y será una de las claves para salir adelante y vencer todas las adversidades.

Con el paso del tiempo, Dipper aprende a dejar de angustiarse tanto y verlo todo desde un punto de vista analítico y racional, para expresar mejor sus emociones y reconocer sus sentimientos, mientras que Mabel madura un poco y comprende que las realidades de lo cotidiano han de ser afrontados con un críterio práctico, sin por ello renunciar a las ilusiones y a una vida más festiva. En este sentido, desde luego que los gemelos Pines ya no son los mismos después de dejar el pueblo misterioso que marcó sus vidas.

Y ya extendida esa premisa al resto del elenco, hay mucho qué decir de algunos personajes importantes:

Candy aparece casi todo el tiempo con Grenda. Candy, tan pequeña, no sólo contrasta sino que hasta pareciera tener que apoyarse en su amiga para sentirse más segura en su mundo.

Pacifica Elise Noroeste. Vaya, tan sólo el mencionar el nombre ya nos habla de una chica nacida en un estrato social privilegiado. Así fue criada y así ha entendido la vida y el mundo, hasta que una serie de situaciones riesgosas para ella, así como sus encuentros con Dipper y Mabel, han generado cambios evidentes en ella, y la volvieron más humana, aunque no sin varios... tropiezos iniciales.

No obstante, reconozcamos sus rasgos contradictorios al inicio de la serie: Pequeña de estatura, la misma edad de los gemelos Pines, y ya necesitada de fama, de popularidad artificial, posesiva, caprichosa, cruel, engreida, vanidosa, arrogante, superficial, desdeñosa, explosiva, manipuladora, mentirosa... 

En fin, podríamos seguirle poniendo adjetivos, pero es claro que, debido a la mala crianza de unos padres acaudalados pero tramposos, Pacifica heredó, literalmente, una serie de exigencias y rígidas reglas de comportamiento que obedeció sin cuestionar, hasta que con el tiempo, las fisuras que han creado en su alma la devolvieron a un estado de fragilidad disimulada, lo que la llevó al círculo vicioso de aferrarse más a su difícil forma de ser, para tratar de negar lo que la está destruyendo.

Sorprende ver a un personaje tan joven y ya con una carga tan pesada. ¿Porqué una niña de apenas doce años tendría tantos problemas? ¿El poder (económico o de cualquier tipo) como razón última deja de lado las necesidades genuinamente humanas, sin remedio?  No hay nada tan salvaje como una familia, diría el teórico de la comunicación, Marshall McLuhan.

Por eso es que el conflicto interno en Pacifica es, sin duda alguna, uno de los más interesantes, y está al mismo nivel de importancia que los experimentados por los gemelos Pines o los Tíos Stan. 

Incluso los mismos creadores de la serie no previeron el impacto que Pacifica Elise tendría dentro de esta trama. Ellos la habían concebido simplemente como mera antagonista de Mabel, pero con el trancurso de los episodios el personaje se fue definiendo cada vez mejor en sus luces y sombras, hasta que terminó siendo del agrado de muchos en la audiencia, por sus matices de personalidad, por su transformación o la recuperación de su estado de inocencia más bien dicho, sin que por ello abandone su carácter inicial. 

Y de Guideon ya ni hablemos. Bueno, sí, digamos algo. Su enana constitución está en relación inversamente proporcional a su enorme ambición. Tuvo delirios de dominio. Primero el pueblo de Gravity Falls, después, ¡El mundo!

Desde aquellas primeras representaciones satíricas de Napoleón, que lo mostraban como muy bajo de estatura pese a ser un militar que se hizo coronar emperador, prácticamente todos los dictadores y villanos de la vida real y de la ficción han sido retratados o caricaturizados para recordarles su fragilidad inescapable, la misma que nos iguala a todos como seres humanos pero que hace a tantos desesperarse y crearles la obsesión por el dominio, por el poder. 

(Un dato curioso: según algunos historiadores, Napoleón en realidad no era tan pequeño de estatura. Tal vez sólo se trató de un afán de caricaturistas y pintores de esa época por satirizar y ridiculizar al tirano.)

Con respecto a Wendy también hay mucho qué decir, pero dejaremos su análisis a fondo para otro día. Por el momento podemos afirmar que, sin ser adulta todavía, es algo mayor de estatura y edad; en ese aspecto físico del tamaño tiene lo que a Dipper le hace falta, según él.

Pero, pese a las apariencias, Wendy, como otros adolescentes, no se siente a gusto con su condición. Aún le falta mucho: creció, pero se ve escuálida, aún en proceso de crecer. Su complexión representa sus carencias como pocos personajes en "Gravity Falls". Además, la madurez física no siempre viene acompañada de una madurez mental; por lo general, una llega antes que la otra.

Su infancia durante la cual no tuvo una imagen agraciada (ella misma lo reconoce ante Dipper, cuando la pelirroja le muestra una foto con sus hermanos), las exigencias académicas y el trabajo en "Mystery Shack" que la aburren casi hasta las lágrimas, y la hacen querer salir corriendo para divertise con sus amigos, y el ser una mujer en una familia sin una figura materna... crean las condiciones perfectas para un caos interno adolescente. 

Si a eso sumamos los numerosos noviazgos que resultan en decepción, todo se sintetiza en su anhelo de encontrar un estado de gracia que siempre le es negado. Dipper es el tipo de persona que a ella le agrada, pero, él es un niño y ni hablar, ella sabe mejor que Dipper que sólo han de ser amigos. Por eso las escapadas, las fiestas en las que puede estar, le saben de maravilla.

Y sin embargo, sus momentos malos son muy malos. Cuando rompió su relación con Robbie, incluso la vimos llorar. ¿Cuántas veces habrá llorado, por tantas cosas? ¿Cuántas veces sufren las y los adolescentes en público y en privado? 

¿Cómo es que no se volvió loca? Con razón Wendy se aferra a exhibir esa personalidad alegre y desendadada, pues esa es la cara que quiere mostrar a los demás. No es una máscara, como algunos pensarían, sino una aspiración que trata de volver realidad cada día. 

Su deseo de mantener una actitud positiva es la mejor prueba de la fortaleza que la caracteriza por otro lado, cuando es valiente también, y es ahí cuando brilla, cuando muestra su crecimiento.

En alguna ocasión, hacia el final de la segunda temporada, (alerta de spoiler) hasta manifestó que desearía ser niña otra vez (cuando tenía menos problemas, tal vez). Ese tipo de contradicciones en ella y muchos otros personajes son precisamente lo que los hacen tan, peculiares.

Con Soos la cosa es más sencilla, al menos en principio. Él es un niño grande, y es debido a un trauma de la infancia que no ha madurado psicológicamente lo suficiente. 

En efecto, el asumir metas más adultas, como buscar pareja por ejemplo, lo sacará paulatinamente de ese estado pueril en que lo conocimos al comienzo de la serie.

Por último, incluso hay algo qué agregar sobre los personajes plenamente mayores, como los hermanos Stanley y Stanford. Ellos alguna vez fueron niños y después jóvenes, y los malentendidos que arrastran desde años atrás es motivo de constates discusiones entre ellos. 

La infancia y la adolescencia habrán quedado atrás, pero los conflictos internos que han dejado huella pueden perseguirlos todavía mientras no se resuelvan, como ocurre en la vida real, y es en ese otro aspecto que la serie animada conecta con las audiencias de distintas edades.

Y bien, eso es todo por hoy. En el próximo artículo vamos a hablar de una rivalidad de la que muy pocos han tratado. ¿Cuál será? Ya lo veremos la siguiente semana. 

Hasta el siguiente misterio.